Nuestra casa Rural y su piscina

Pensábamos que   este año no íbamos a aprovechar por Córdoba  la piscina de nuestra casa rural , pero ha sucedido todo lo contrario. El pasado otoño las aguas llegaron pronto y a pesar de la cubierta que protege la piscina de nuestras casa , simplemente no apetecía;  por cuestiones de temperatura , y de ánimo. Cuando el sol está arriba   si la temperatura es buena darse un chapuzón incluso en otoño no es una idea descabellada ;   pero cuando el día está encapotado y  los charcos  reflejan las farolas en las calles ,son  castañas asadas  chimenea  y parchís lo que el cuerpo pide .  Nuestros huéspedes han podido  sin embargo disfrutar este año de una sensación   muy propia de  Marbella.   Es común  especialmente en San Pedro ver  a la gente en chanclas camino de la playa  y comiendo  un cartuchito de castañas asadas. Un olor y un sabor  tan de invierno a veces pega poco con la piscina o la playa pero la climatología es así. Hemos podido bañarnos y comer castañas asadas.

Una  de  transiciones hacia el otoño mas calurosas y secas  de los últimos años  hace que haya sido posible bañarse en la piscina de la casa  rural  hasta  hace solo unos días , el día del Pilar todavía apetecía darse un  buen   chapuzón. Es cierto que la cubierta  de nuestra piscina ayuda a mantener  bastante la temperatura y un ambiente agradable con el sol otoñal. Durante el caluroso verano de Córdoba la piscina de nuestra casa rural si que muestra su aspecto habitual  de piscina de Verano , sin ningún tipo de cubierta  aprovechando en todo lo posible  el aire libre.

La protección de la piscina también impide , que los niños tengan ningún accidente. Durante el invierno cuando apetece disfrutar mas de los salones de nuestro alojamiento rural , podemos relajarnos con mas tranquilidad, porque accidentalmente no se puede acceder a la piscina